Miguel Enrique Villavicencio.- Para Rafael Narváez, exparlamentario y abogado defensor en materia de Derechos Humanos en el país, el régimen de Nicolás Maduro muestra un gran desprecio por los DDHH y el bienestar social del pueblo, al decidir cancelar un mísero aguinaldo y de paso en cuatro partes.
Opina además que ofrecer a los maestros un morral de cuero con un par de zapatos es humillante, dado que esto por ningún lado garantiza la seguridad social que se merecen los docentes.
Narváez rechazó el trato que el Gobierno les ha venido dando a los educadores, trabajadores del sector público y a los pensionados y jubilados.
Resalta que las luchas de los docentes, trabajadores activos, pensionados y jubilados por un buen salario y pensiones dignas son justas.
– Incluso son necesarias para poder sobrevivir en esta feroz hiperinflación que pareciera que luce indetenible y que cada día continúa destruyendo el valor de la moneda nacional – expresa.
Desde su punto de vista, la demostración más evidente de la indolencia del Gobierno por los Derechos Humanos del pueblo, es precisamente dividir el insignificante aguinaldo en cuatro partes.
– Estoy plenamente seguro que estos aguinaldos se convertirán en sal y agua y condenará a los trabajadores del sector público a una navidad muy gris y miserable – destacó.
Narváez sostiene que las festividades decembrinas serán para los poderosos que tienen el privilegio de contar con sus «tres papas», buenos servicios básicos y seguros de salud con cobertura en divisas.
Para concluir, indicó que en Venezuela los derechos humanos y garantías constitucionales siguen siendo vulnerados sistemáticamente por parte del Estado.
